Sonatina

No camino, no corro, no gateo ni me arrastro;
sólo creo.

Has arrebatado los sonidos.
No hace falta mencionar tu nombre.

Aemeoerre. La blasfemia ahora sólo es mito,
porque naciste de mis cantos,

confío en que has tocado este holograma
elemento de misterios y obviedades.

Así,
encuentro lo que tienes entre las manos.

Comentarios